Catalina de Lima vive en Pasaje 82 y Zapiola, de Posadas, toda su vida fue lavandera y hoy, casi en la ancianidad, sigue dedicada a la misma actividad “porque si no lavo ropa no como”, dijo a Noticias de la Calle y Canal 2
“Hay veces en que no puede dormir del dolor del reuma pero tengo que seguir”, comentó la mujer, quien agregó: “me gustaría que me ayuden, que me consigan una casita donde pueda vivir dignamente, porque ahora estoy viviendo como un ratón, entre el agua y la mugre”, dijo con lágrimas en los ojos. “Cuando llueve en mi casa entra agua y la humedad me hace peor todavía, ya estoy cansada de vivir así, estoy cada vez más vieja y llega un momento en que quiero descansar, pero no tengo ayuda de nadie, a veces en el comedor me dan una bolsita de mercaderías”, comentó. Catalina quiere jubilarse, pero no tiene aportes; “toda mi vida lavé ropa y hay días en que me duele la espalda, las manos y el pulmón de tanto lavar y planchar, pero tengo que seguir”, sostuvo resignada.
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