MÁS VÍCTIMAS DE UNA TRAICIÓN

Lun 06/09/2010 | Archivo

Otra vez la desesperación de una familia misionera y la angustia de toda la comunidad; otra vez esa terrible sensación de pérdida que se oculta detrás de una esperanza por el poco probable hallazgo con vida de un ser querido, desaparecido en las aguas del río.
¿En qué se ha convertido el que fuera nuestro río Paraná, qué han hecho con él para que se vuelva en contra de los misioneros, para que dejara de ser aquel río peligroso pero noble para convertirse en un río-lago fantasmal, traicionero y devorador de nuestro territorio y de nuestras vidas? Cuando décadas atrás se empezaban a desarrollar los “estudios de factibilidad” de lo que sería la represa de Yacyretá (o sea, en la etapa en que estamos actualmente respecto de la proyectada represa de Garabí), también se estudiaba la “factibilidad” de venderle buzones a los misioneros; y se desarrolló una campaña de distribución de estampitas con imágenes que se quería que los misioneros veneren incautamente. Ese santoral profano y perverso estaba constituido por lindos dibujitos casi fotográficos en los que se veía a un río fantástico que acariciaba dulcemente a Posadas y sobre el cual felices y sonrientes misioneros disfrutaban de toda clase de deportes náuticos y de playas de ensueño. Después se hizo la represa, se produjo la previsible contaminación del río y el también previsible cambio del sistema de corrimiento de las aguas, sobre todo a la altura de Posadas y de Encarnación. Los que distribuyeron aquellas estampitas idílicas desaparecieron; no en las aguas como están desapareciendo frecuentemente los misioneros, sino que se volvieron a sus lejanas y lujosas oficinas para seguir proyectando otros “paraísos” con que embromar a la gente. Mientras tanto, aquí siguen desapareciendo nadadores, remeros, pescadores, bañistas. También desaparecieron las lanchas de pasajeros y, hace rato, desaparecieron los que deberían asegurarnos que el puente entre Posadas y Encarnación sigue estando en buenas condiciones. Ahora otro accidente, otro drama frente a Posadas; volcó una embarcación de pescadores y uno de ellos desapareció en estas aguas que ahora son traicioneras. Se lo busca intensamente, con la activa solidaridad de muchos, como se buscó no hace mucho a los desaparecidos en la cruel competencia llamada “cruce del río”. Quién sabe cuántos otros misioneros esperan, sin saberlo, ser víctimas fatales de esta traición.

NOTICIA DE ARCHIVO


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