CRISTÓBAL LÓPEZ: UNA MUESTRA DE ESTA ARGENTINA

Dom 25/03/2018 | Archivo

Los sucesos desarrollados en torno de la situación de Cristóbal López, “un botón de muestra” de cómo está la Argentina de hoy. El escándalo de Facebook y la exhibición de ciertas tonterías humanas. El “Caso Odebrecht” se “comió” al presidente de Perú. Elecciones en Rusia: ¿Habrá Putin para rato?
Una buena parte de la sociedad, azuzada por los medios de prensa, se escandaliza ante hechos como el que acaba de suceder y tiene como protagonista a Cristóbal López. Situaciones como ésta no son nuevas -ni ésta es la más desvergonzada-, abundan en determinados momentos de la humanidad, en los momentos de decadencia de las sociedades en las que se producen. Vayamos a un ejemplo histórico, cuando comenzaban los tiempos del atardecer del Imperio Romano, hace más de 2 mil años atrás. En ese momento el poderío militar de Roma, el que le había permitido constituirse en la gran potencia de la tierra, iniciaba su declinación. La degeneración del poder comenzaba a extenderse por aquella sociedad, corroía sus cimientes y preparaba las condiciones para que los bárbaros terminaran con tamaño poder. De esa época hay dos textos que hoy es bueno recordar. Uno pertenece a Marco Porcio Catón, un hombre digno e incorruptible, quien advertía: “Los que roban a un particular pasan la vida entre esposas y grilletes; los que roban al Estado, entre oro y púrpura”. No es menos imponente el pensamiento de Plauto, un autor de comedias satíricas, quien le hizo decir a uno de sus personajes: “la corrupción está santificada por la costumbre, liberada de toda ley”. Nosotros no tenemos ningún Imperio, pero sí formamos parte de una cultura que nos legaron los mismos que fueron señalados críticamente en los textos citados. Esa cultura y sus manifestaciones institucionales están en crisis. Sólo falta saber qué tiempo les demandará a los nuevos “bárbaros”, que merodean las fronteras de esta corrupta civilización, ver cómo ella se cae del pedestal de barro sobre la que está construida. ¿A qué viene todo esto? A dos cuestiones. Una a lo que pasa y pasó con Cristóbal López y la otra cómo “el muerto se asusta del degollado”. Respecto de Cristóbal López, al momento de la llegada de los Kirchner, ya era un empresario arraigado en la zona patagónica. Desde allí en adelante su poder económico se multiplicó, asociado al poder de turno. Una semana antes de dejar la presidencia, Néstor firmó el decreto 1851/2007 por el cual prorrogó por 15 años la concesión de las máquinas tragamonedas del Hipódromo de Palermo. Allí se lo “intimaba” a poner más máquinas tragamonedas. López llegó a tener más de 10 mil máquinas. Con sus ganancias construyó la petrolera Oil Combustibles. Desde allí defraudó al Estado al no depositar los importantes impuestos que el Estado aplica a la venta de combustibles (que ronda el 40% del valor de la nafta que cargamos en las estaciones). Con ese dinero (que se mide en miles de millones) compró y compró medios de prensa puestos al servicio de las políticas oficiales. Con el cambio de gobierno, ese emporio se empezó a venir abajo. Fue preso por aquella defraudación y ahora recuperó la libertad en extrañas circunstancias que han llevado a que la Suprema Corte intervenga. Como se ve el Estado, siempre el Estado es la vaca lechera de la cual maman estos “afortunados”. En este caso mediatizada por el juego, ese vicio al que se lo alimenta sin vergüenza con tal de conseguir beneficios. Para que “el muerto no se asuste del degollado”, recordemos que el macrismo tiene en Daniel Angelici, su López propio. Amén que la fortuna de los inmigrantes Macri, comenzando por Franco, el padre del Presidente, se hizo a costas del Estado. Aunque es cierto, después pusieron la plata a buen resguardo en paraísos fiscales. De modo tal que no es mucha la autoridad presidencial para escarbar en la basura de algunas riquezas sin exponer la mugre del origen de sus bienes. Como decían los romanos, parece que robarle al Estado es lícito y meritorio, del mismo modo que la corrupción está santificada por la costumbre. Pero ¿Dónde fue a parar aquel imperio romano? ¿Y nosotros? Nosotros, ¡así estamos! CASO FACEBOOK: ESCÁNDALO Y TONTERÍA HUMANA En estos días hay conmoción mundial -en los medios políticos e informáticos- por una denuncia sobre la utilización de datos provenientes de Facebook y utilizados por la empresa inglesa Cambridge Analytica para intervenir electoralmente, al servicio de la corriente política que los contrate. Llama la atención el escándalo desatado en torno de esa relación entre las redes sociales y su influencia sobre determinados comportamientos, en este caso electorales. Cualquiera de nosotros, sólo mediante el uso del sentido común, está en condiciones de imaginar que no es posible que el actual desarrollo científico-técnico de la informática sea ajeno a los sistemas de inteligencia de los países más desarrollados. Por las dudas, cabe recordar que Internet es una creación militar que luego fue puesta en circulación al “servicio” de toda la sociedad. La incidencia de estos sistemas de propaganda segmentada, según el interés manifestado por los usuarios de las redes, ya fue comentada en estas mismas páginas hace más de un año. Eso se hizo con motivo de su utilización -prácticamente pública- por Barack Obama (2012) y su masificación -para nada oculta- en la última elección norteamericana (2016), en este caso al servicio de Donald Trump. Más aún, un científico alemán, radicado en Silicom Valley planteó que el uso de esta metodología nos llevaba a una “dictadura informática”, por su decisiva incidencia sobre los resultados electorales. Según la información pública, este mecanismo fue “descubierto” luego que un periodista, haciéndose pasar como operador de un candidato africano, lograra grabar que un directivo de la empresa inglesa le contara los detalles de su “modus operandi”. Más allá de esta inocente explicación, es obvio que -detrás de esta maniobra- hay importantes intereses en juego. Por lo pronto, el imperio de Mark Zuckerberg, el joven creador y mandamás de Facebook está en peligro. En cuestión de horas su empresa perdió 37 mil millones de dólares. ¿Guerra de servicios?, ¿guerra empresarial?, ¿contrapuestos intereses estatales? Vaya a saber! Ahora el fundador de Facebook salió a dar explicaciones, se hace el tonto. Habla como si no supiera que gran parte de su imponente riqueza proviene –al igual que la de sus congéneres de otras redes- de la monetización de la información que le proporcionamos nosotros, ganados por esa especie de tontería humana. La misma que nos hace pagar por compartir información por la cual ellos cobran. Se trata de esa información que comercian, para luego -tratándonos como incapaces- llevarnos a que consumamos la ropa, el gusto cultural, la comida y también el voto que a ellos les conviene. Triste paradoja de la actual humanidad, cargada de información y carente de decisión sobre sus propia vida. CASO ODEBRECHT: SE “COMIÓ” AL PRESIDENTE DE PERÚ Sabemos que la empresa brasileña de construcciones Odebrecht es la más grande de la región. Desarrolló las más importantes obras públicas de toda la zona. A nadie escapa que para realizarlas debía negociar con los diferentes gobiernos. Tampoco resulta extraño que para realizar ese tipo de obras fuera conveniente “aceitar” las relaciones con los funcionarios de turno de estos países con “atenciones” que facilitaran tales contratos. La hermana República del Perú fue uno de esos países. Alejandro Toledo -ex presidente de ese país- está prófugo de la justicia del país que presidió y reside en Estados Unidos. Es acusado de haber recibido alguna de esas “atenciones”. Durante el período en que se realizaron esas obras, igualmente gobernaron Alan García y Ollanta Humala, quienes también están siendo investigados. El largo brazo de Odebrecht también llegó hasta estos pagos. El mayor cuestionamiento aparece vinculado a las obras del soterramiento del ferrocarril Sarmiento, donde tuvieron injerencia el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (Jefatura de Gobierno de Macri) y el Gobierno nacional (mandato de Cristina). Hasta hoy, la persona más involucrada es Gustavo Arribas, actual jefe de los espías de Mauricio Macri. No se sabe muy bien el destino que tendrían los fondos que habría recibido. No hay que olvidar que una de las empresas que debía realizar esa obra era IECSA que pertenecía a Ángelo Calcaterra, primo del actual Presidente. Como entre “bueyes no hay cornadas”, esa investigación va muy, demasiado, lenta. La renuncia del Presidente de Perú se veía venir. Ya estaba acosado por estas denuncias. Hace pocas semanas logró zafar liberando al ex presidente Alberto Fujimori, preso por corrupción y delitos de lesa humanidad. Eso le permitió salvarse por una división del bloque fujimorista, en manos de la hija y el hijo del ex Presidente. Tramoyas de esa misma división son las que ahora forzaron su renuncia. Lo cierto e importante es que el caso Odebrecht seguirá como una sombra a quienes son o han sido funcionarios de primera línea de varios países de la región. De una u otra manera la renuncia de Dilma Rousseff y la crítica situación penal de Luiz Inácio “Lula” Da Silva, tienen su origen en el “Lava Jato”, la investigación sobre esta misma empresa, en su país de origen. Quién está detrás de estas investigaciones es fácil saberlo. El refugio del que goza el ex presidente Toledo en territorio norteamericano es una prueba. El objetivo es claro: Tener a mano un instrumento cierto para controlar, con el mecanismo de la denuncia por corrupción, a dirigentes de la región. El renunciante presidente peruano, no tenía la fuerza o voluntad suficiente para abrir la minería peruana a los capitales occidentales. A pesar de ser un funcionario ganado por los intereses norteamericanos, el miedo y las inversiones chinas lo tenían paralizado. ELECCIONES EN RUSIA: ¿HABRÁ PUTIN PARA RATO? Vladimir Putin acaba de ganar unas nuevas elecciones y por cuarta vez asumirá su mandato como Presidente. Superó el 75% de los votos emitidos. En segundo lugar quedó un candidato del Partido Comunista que reunió el 16% de los votos y tercero un ultranacionalista con el 7% de los sufragios. En su primer discurso -después del triunfo- ovacionado por sus adictos dijo, “Rusia está condenada al éxito y debemos mantener la unidad”. Desechó toda posibilidad que Rusia esté involucrada en los envenenamientos de ex agentes de la inteligencia rusa, dentro del territorio de la Gran Bretaña. En eso coincide con muchos especialistas en temas internacionales, quienes descartan su participación porque no ven las ventajas para Rusia de una operación que le acarrea a Moscú grandes problemas diplomáticos y pone en entredicho sus acuerdos con Alemania y Francia. Ahora Putin deberá enfrentar las difíciles condiciones internas. Deberá atender a dos problemas. Su eventual y compleja sucesión en el 2024. El otro desafío es responder a las demandas inmediatas de los 143 millones de rusos, un 13% de los mismos vive bajo la línea de pobreza. Los grandes países europeos están preocupados por el fenómeno Putin y este reverdecer de Rusia. Como una prueba de ello, hace unos pocos días, volvieron a poner en circulación un polémico discurso de Putin, frente a los militares, donde criticaba muy duramente a Occidente por su apoyo al terrorismo y por estar en contra de la familia tradicional y la heterosexualidad. Acusa que esos objetivos apuntan a disminuir la población mundial. Terminaba diciendo que ello podría desatar la ira de Dios o de él mismo. Por eso, alguna prensa occidental lo ha calificado como un nuevo Hitler.

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