Lo afirmó el gobernador, Hugo Passalacqua, al dejar inaugurada la 38 Edición nacional y 13 internacional, en el predio de la Expo Yerba, en Apóstoles. El mandatario destacó el esfuerzo permanente del colono en sus chacras y la valentía de quienes sostienen a través del tiempo la fiesta yerbatera
La ceremonia se inició con la colocación de una ofrenda en el monumento al tarefero y el tradicional corte de cinta, con el cual se habilitó el predio ferial. Tras la bendición impartida por un sacerdote y un pastor, hizo uso de la palabra, Esteban Fridlmeier, miembro del directorio del INYM, quien asumiendo la representación de la entidad transmitió su conformidad "porque pudimos mejorar un poco la situación del precio en un año que no fue muy fácil. Es un año difícil para todos los argentinos, para los yerbateros en particular y como integrante de esta zona productora tenemos que asumir el firme compromiso de promocionar y expandir el producto Yerba Mate Argentina en los distintos horizontes del mundo". Aseguró que la única manera de esperar que la yerba mate siga sembrando bienestar es multiplicando su consumo, "y el INYM no ha escatimado esfuerzos y lo sigue haciendo" en este sentido. El gobernador Passalacqua cerró a lista de oradores agradeciendo a los organizadores y recordando a todos los que "tuvieron la valentía, el coraje, y las ganas de sostener la llama de la fiesta durante tantísimos años, demostrando el temple del apostoleño". Aseguró que sin desmerecer a las otras fiestas, "esta es la más argentina", teniendo en cuenta que el 95 por ciento de los hogares del país tienen al menos un paquetito de yerba. "No debe haber producto más argentino que la yerba mate, y con todo respeto a los hermanos correntinos, debo decir que esta es la más misionera de las fiestas". Tras el acto protocolar y las palabas alusivas, el gobernador junto a los funcionarios recorrieron el predio, saludando a los expositores y al público que se acercaba a medida que caminaban por la feria.
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